sábado, 17 de enero de 2015

Sobre miserias cotidianas

Recuerdo ahora a alguien que decia, "espero que no piensen de mi que soy buena persona", convencido de que nunca podrian achacarle ese defecto, aunque sí tildarle de ser lucido hasta rallar lo ofensivo.
A veces pienso que el mundo aparenta estar lleno de buenas personas solo porque confundimos inocencia con estupidez. A Demasiada gente que pasa por buena a poco que les rascaras les afloraria una capa profunda de perversidad que con sumo cuidado ocultan hasta de si mismos. Solo desde esa premisa se pueden entender episodios no tan lejanos de nuestra historia: normalmente somos mala gente, pero sabemos disimularlo muy bien.
Tambien conozco, por contra, a algunos personajes que para poder mirarse al espejo, se las apañan dia a dia con sus propias miserias. Las asumen aunque no les gusten. Son conscientes de que jamas podran huir de ellas. Seran lo que sean, pero son honestos.
Sin embargo, hasta para esos que a fuerza de aceptar sus debilidades terminan siendo (incluso a pesar suyo) buenas personas, les pueden resultar insoportables ciertas infamias triviales.Y es que hay maldades de la vida cotidiana para las que la unica cura es el olvido o la locura.
Eso o suscribir lo de "ni olvido, ni perdono" y sentarse a esperar una buena oportunidad. A veces solo es cuestion de tener paciencia...o de ser tozudo.


No hay comentarios: